El Gobierno presentó la agenda con la que buscan reactivar la economía del país, que se ha visto afectada a consecuencia de los eventos recientes ocurridos en el país y que revelaron este lunes una caída en la actividad económica de 3,4% en octubre, según lo informado por el Banco Central. Cabe destacar que esta cifra no se había visto desde hace 10 años, en plena crisis subprime.
Al respecto, el Intendente de Atacama, Patricio Urquieta, dijo que “nuestra economía tiene fundamentos sólidos, instituciones sólidas, un sector empresarial y trabajadores comprometidos que quieren trabajar. Sin embargo, la violencia, los saqueos, la destrucción crearon altos costos que afectan la capacidad de trabajar y la inversión, y sin crecimiento económico es inviable avanzar en temas sociales. La caída del Imacec significa que miles de empresas y empleos están en riesgo, y que afecta en gran medida a muchos chilenos. Las personas que tienen Pymes son las más afectadas y por eso en el Gobierno tenemos una prioridad social con sentido de urgencia que es proteger el empleo”.
El plan de reactivación contempla un mayor gasto público en 2020 por 3.025 millones de dólares para protección de empleos y recuperación económica, un apoyo financiero de 1.950 millones de dólares para las Mipymes y otros 525 millones para otras iniciativas, como la reconstrucción del metro de Santiago, gravemente dañado desde el inicio de la crisis el 18 de octubre. Con esta batería de medidas se crearán unos 100 mil nuevos empleos en 2020.
El Intendente Urquieta expresó que “hoy nuestro objetivo es mitigar los efectos de la actual situación que viven muchas personas, apoyando la creación de empleos, de forma directa o indirecta mediante el incremento de la inversión pública, así como a través del apoyo a Pymes. Ahora hay que seguir avanzando de forma responsable, y la agenda social es un claro punto de inflexión, que implica recursos por cerca de US$5.000 millones entre 2020 y 2022 en materia de pensiones, en la rebaja de las tarifas del transporte público para el adulto mayor, en la salud, el los remedios y también en el ingreso mínimo garantizado”.
Con este plan, el gasto público crecería 9,8% real en 2020 comparado con la ley de presupuesto del 2019. Por su parte, el déficit fiscal se elevará hasta 4,4% del PIB el próximo año.
El plan de protección del empleo apoya la adaptabilidad de la jornada laboral para evitar despidos. Aquellas empresas que acrediten haber sido afectadas por la crisis podrán permitir una jornada laboral inferior y pagar el proporcional a sus empleados afiliados al Seguro de Cesantía. El fondo solidario del seguro compensará en parte la diferencia. Además contempla el fortalecimiento del seguro de cesantía y la aceleración transición del componente solidario de pensiones.
El plan de inversión en infraestructura y reconstrucción contempla un monto de US$ 3.025 millones los que están focalizados en proyectos de rápida ejecución.
– Reconstrucción excluyendo Metro: US$ 855 millones
– Proyectos de inversión en regiones: US$ 480 millones
– Construcción de vivienda, subsidios y mejora de barrios: US$ 350 millones
– Adelanto de inversión en equipamiento local: US$ 218 millones
– Tren Santiago-Melipilla, con un costo total de US$ 1.500 millones en cinco años y US$ 200 millones por año en los próximos dos años
– Obras de agua potable por US$ 200 millones
El plan de apoyo a las Pymes busca la devolución anticipada de Impuesto a la Renta para Pymes que sufrieron pérdidas en octubre y beneficia a 500.000 Pymes. Brinda facilidades en el pago del IVA de octubre, noviembre y diciembre: 12 cuotas sin interés a partir de febrero de 2020. Contempla un régimen especial de donaciones para MiPymes por un período de 18 meses. Acceso a mejores créditos gracias a la capitalización Banco Estado, Fogain y Fogape y apoyo el emprendimiento y turismo vía Sercotec y Corfo por 50 millones de dólares, beneficiando a 20.000 Pymes.