Tomar la mejor decisión pensando en el bienestar de las personas y considerando todas las variables posibles fue el mensaje que el seremi de Energía de Atacama, Marcelo Sepúlveda, en sintonía con lo expresado por la ministra, Susana Jiménez, transmitió en mayo pasado al anunciar que durante agosto el Gobierno del Presidente Sebastián Piñera definiría los husos horarios para los próximos cuatro años.
El cambio de hora que se realizó el pasado sábado 11 de agosto fue el último establecido en el Decreto Supremo 253 de 2016, lo que obliga al Gobierno a definir el nuevo régimen horario del país. Dicho decreto establecía horario de invierno (UTC -4) durante tres meses, entre el segundo sábado de mayo y segundo sábado de agosto, y el resto del año horario de verano (UTC -3).
Durante los últimos tres meses, el Ministerio de Energía consultó a más de 40 representantes de instituciones públicas y privadas, de la sociedad civil y especialistas, para recopilar antecedentes técnicos y científicos sobre el impacto de los husos horarios en la salud, educación, productividad, seguridad, telecomunicaciones, transportes y eficiencia energética, entre otros.
Más luz para todos
“Hemos decidido como Gobierno que a partir de 2019 se aumentará a cinco meses el horario de invierno (UTC -4), del primer sábado de abril al primer sábado de septiembre. Esto permitirá tener más luz en las mañanas. Por ejemplo, en Copiapó, con el régimen actual, tenemos 40 días sin sol antes de las 08.00 am, el sol sale en promedio a las 08.14 horas, en cambio con el nuevo huso los días sin sol antes de las 08:00 am se reducen a cero, y en promedio el sol aparecerá a las 07:54 horas”, explicó el seremi de Energía, Marcelo Sepúlveda Gárate.
En tanto que, también “se reducirán prácticamente a cero los días en que el sol saldrá después de las 8 de la mañana, entre las regiones de Arica y El Maule. Lo que beneficiará a 12,6 millones de personas, que equivale al 70% de la población. En el resto de las regiones de Biobío a Aysén habrá muchos más días con luz en las mañanas”, anunció la ministra de Energía, Susana Jiménez, en conferencia de prensa en compañía del subsecretario Ricardo Irarrázabal.
La secretaria de Estado enfatizó que ello “es relevante porque la ciencia ha demostrado que tener luz natural en las mañanas es muy importante para el bienestar de las personas y, en especial, para el crecimiento y aprendizaje de los niños. Y los niños, en nuestro Gobierno, tienen una atención prioritaria y un cuidado especial”.
El subsecretario Irarrázabal agregó que la evidencia científica ha demostrado que iniciar las actividades diarias sin luz natural tiene un efecto negativo sobre la salud, la concentración y el desempeño de las personas, especialmente en niños y adolescentes, quienes por su ciclo biológico de crecimiento despiertan naturalmente más tarde que los adultos, y requieren de luz natural para un mejor aprendizaje.
Susana Jiménez también destacó que el horario de verano comenzará el primer sábado de septiembre de cada año, lo que permitirá también tener más luz en las tardes.
“Ello es importante para que las personas puedan disfrutar de los espacios públicos y actividades de recreación, lo que es parte de nuestra cultura y tradición cuando comienza la primavera”, puntualizó Jiménez.
En cuanto a la región de Magallanes y la Antártica Chilena, ésta mantendrá su horario de verano durante todo el año, tal como lo decidió la ciudadanía en 2017, pero el Gobierno promoverá una Mesa de Diálogo Regional para recabar su opinión al respecto.
“Quiero destacar, además, que este nuevo régimen horario se mantendrá sin cambios durante este gobierno, con lo que queremos darle tranquilidad a la población”, afirmó la ministra Jiménez.
El subsecretario explicó que el anuncio se hace con ocho meses de anticipación para que la población esté debidamente informada, y todos los actores tomen sus decisiones de forma planificada, en especial las relacionadas con tecnologías, actividades productivas y transporte aéreo.