Tras la aprobación en general y en particular de la modernización tributaria impulsada por el Gobierno, los diputados de oposición y oficialismo se dividieron en su análisis sobre lo ocurrido. Los primeros señalaron que esta jornada será recordada como “un día negro para Chile”, mientras que los representantes de Chile Vamos apuntaron a lo contrario: “Una muy buena noticia para los adultos mayores, para las regiones, para la clase media”.
A juicio del jefe de bancada de Renovación Nacional, Alejandro Santana, la aprobación es “una buena noticia”, ya que “hay miles de pequeñas y medianas empresas que están seguramente con la expectativa y la esperanza de poder invertir y ser actores importantes para reactivar la economía”.
Por su parte, el diputado Patricio Melero (UDI), que integra la comisión de Hacienda, destacó “la importancia de los acuerdos en la política”, luego de que 12 diputados de la Democracia Cristiana votaran a favor de la idea de legislar y luego ocho respaldaran la reintegración, frente a los cinco que rechazaron y una abstención falangista.
“El Gobierno hoy día ha logrado una aprobación gracias al apoyo de un acuerdo alcanzado con un sector de la Democracia Cristiana que entendió lo que la izquierda sigue sin entender. Necesitamos dialogar y ponernos de acuerdo para reimpulsar la economía para tener un sistema tributario como el que se está aprobando hoy día”, destacó el gremialista.
En el caso del diputado Sebastián Álvarez de Evópoli, calificó la aprobación como “un paso histórico”, destacando que ésta “fortalece al mundo de las pymes”.
“Las regiones serán favorecidas con el 1% que recibirán de los grandes proyectos de inversión y por primera vez, comenzaremos a aplicar un impuesto verde asociado a las emisiones de contaminantes, incluyendo el material particulado”, sostuvo.
“Estamos convencidos que esta reforma tributaria entrega certezas jurídicas importantes para que se promueva la inversión, el crecimiento y el desarrollo de nuestro país”, añadió el diputado de La Araucanía.
Oposición
Al otro lado de la vereda, el diputado Daniel Núñez (PC) aseguró que lo ocurrido en la Cámara es “un retroceso para Chile”.
“No solo hemos perdido una batalla tan importante como es que se rebajo en 800 millones de dólares a los más ricos, por lo tanto en Chile crece la desigualdad, sino que también en normas básicas de combate a la elusión”, indicó el presidente de la comisión de Hacienda.
Por su parte el diputado Giorgio Jackson, cuestionó que desde el Gobierno no explicaran “por qué en el Chile desigual de hoy va a tener sentido que los Luksic, los Piñera, los Paulmann, los Aangelini, los Matte, paguen menos impuesto de lo que pagan hoy”.
“Nosotros creemos que eso no tiene sentido, independiente de algunos puntos que nosotros hayamos aprobado en lo particular, la reforma en sí como un conjunto y el corazón de la reforma es lo que vamos a seguir tratando de comunicar en todas partes, que es regresiva y perjudicial para nuestra sociedad”, insistió.
La diputada de la Región de Los Lagos, Jenny Álvarez (PS), aseguró que “esta reforma implica que volvemos al pago proporcional: Los grandes empresarios disminuirán sus pagos de impuestos en el orden de los 1.400 millones de dólares. Todos estos recursos se dejan de entregar a los jóvenes que necesitan estudiar gratuitamente en nuestra región , por ejemplo, y se lo entrega a los más ricos”, declaró.
Añadió que “la reforma del gobierno de Michelle Bachelet ya está recaudando un 16% por ciento más de impuesto que va directamente en beneficio a temas sociales. ¿Qué ha hecho la derecha?, darle más recursos a los más ricos de este país”.
La división DC
El diputado Núñez también quiso centrarse en la Democracia Cristiana, pero destacando a quienes votaron en contra de la reintegración.
“Yo creo que ese es un gesto de enorme valor político, porque esa es la señal que la oposición necesita para poder rearticularse, demostrar que tenemos principios, que luchamos por la equidad, que entendemos que los impuestos tienen que se progresivos, que tienen que ayudar a combatir la desigualdad”.
Ante ese emplazamiento, el jefe de la bancada de la falange, diputado Gabriel Ascencio, recalcó que el voto mayoritario a favor se debió a que “nosotros teníamos un compromiso con los emprendedores de Chile, con la pequeña y mediana empresa”.
“Nosotros somos unos convenidos de que el verdadero corazón de esta reforma-modernización, tiene que ver con los emprendedores de Chile, con la pequeña y mediana empresa. Ese compromiso era simplificar su contabilidad, bajarle los impuestos, darle más acceso a la posibilidad de que con sus recursos ellos pudieran seguir emprendiendo y eso es lo que nosotros hicimos”, recalcó.
Consultado sobre por qué no hubo una postura única entre los demócratacristianos, el parlamentario contestó que “somos una comunidad de seres humanos, cada uno tiene una posición, para mí es redifícil poder explicar la situación del resto de los diputados”.
Entre los que votaron en contra estuvo el diputado Raúl Soto, quien junto con nuevamente poner en duda su continuidad en el partido, asegurando que está en un proceso de “reflexión”, señaló que “hoy es un día negro para Chile, hoy lamentablemente se ha cruzado por una parte de la Democracia Cristiana y de sus parlamentarios y por quienes conducen el partido, una línea que era infranqueable, creo que esto es sin retorno”.
Fuente: emol